Buflomedil

El buflomedil es un vasodilatador periférico con propiedades hemorreológicas, utilizado en el tratamiento de la claudicación intermitente y otros trastornos circulatorios periféricos. Mejora la microcirculación mediante múltiples mecanismos, incluyendo reducción de la viscosidad sanguínea y vasodilatación arteriolar.

Tipos

Presentación en tabletas de 150 mg y 300 mg, y ampollas IV (50 mg/mL). Dosis oral: 300-600 mg/día en 2-3 tomas. Intravenoso: 200-400 mg/día en infusión lenta. Retirado en algunos países por riesgo de efectos adversos graves.

Síntomas

Aumenta la distancia de marcha sin dolor en pacientes con claudicación intermitente (mejoría del 30-50% en ensayos). Mejora síntomas de isquemia crónica (frialdad, parestesias). Puede tener efecto neuroprotector en isquemia cerebral focal.

Causas

Indicado en: 1) Enfermedad arterial periférica estadio II de Fontaine, 2) Trastornos microcirculatorios (acrocianosis, fenómeno de Rayoud), 3) Secuelas de accidente cerebrovascular isquémico (en algunos países). Actúa como antagonista α-adrenérgico y mejora deformabilidad eritrocitaria.

Diagnóstico

Confirmar enfermedad arterial periférica con índice tobillo-brazo (ITB) y estudios de imagen. Evaluar distancia de claudicación y limitaciones funcionales. Descartar causas tratables (aterosclerosis, vasculitis).

Tratamiento

Iniciar con 150 mg VO 2x/día, aumentar a 300 mg 2x/día según respuesta. Tomar con alimentos para mejorar absorción. Terapia IV reservada para casos graves (50 mg en 250 mL de solución salina en 2 horas). Duración mínima 3 meses.

Complicaciones

Cefalea, mareos, palpitaciones, molestias GI. Efectos graves (raros): convulsiones, arritmias ventriculares, hipoglucemia. Contraindicado en insuficiencia renal grave (acumulación de metabolitos).

Prevención

Monitorizar ECG en pacientes cardiacos. Evitar en insuficiencia renal (CrCl <30 mL/min). No usar concomitante con otros vasodilatadores potentes. Suspender gradualmente tras uso prolongado.

Conclusión El buflomedil puede ser una opción en enfermedad arterial periférica seleccionada, aunque su uso ha disminuido por preocupaciones de seguridad y disponibilidad de alternativas. Requiere evaluación cuidadosa de relación riesgo-beneficio en cada paciente.

Fuentes: Gerhard-Herman MD et al. *Circulation* 2021;135:e686-e725. | Aboyans V et al. *Eur Heart J* 2022;43:3421-3432.
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